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Delicioso salmorejo cordobés para disfrutar de él un día caluroso.
Lo primero, es poner el pan de mollete en remojo para que cuando los añadamos a la mezcla esté blandito.
Cuece los tomates en agua. Cuando rompan a hervir, retira la cazuela del fuego y ponla bajo el agua fría. Cuando los tomates estén templados, pélalos (lo harás muy fácilmente), quita el corazón y ponlos en un vaso de batidora.
Añade el ajo pelado, el aceite de oliva, el pan que habíamos dejado en remojo y sal al gusto. Bate hasta que la mezcla quede bien fina. Enfría el salmorejo en la nevera.
Para decorar podemos usar un o dos huevos cocidos picados y taquitos de jamón